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martes, 28 de enero de 2014

La canción del pescador.

Lejanas estrellas entre negras nubes iluminadas por una luna llena,
frías respiraciones culminan en vahos excelsos,
caricias gélidas de brisas tenues derriten las desnudas mejillas,
pasos firmes marchan precisos a través de la oscuridad en el tiempo,
sonidos debiles gritan entre el murmullo del relajado silencio...
y por fin llega el olor de las olas trabajando la piedra con la paciencia de lo imperecedero.
Estoy otro día a orillas de mi mar...
cuanto lo echaba de menos.

Toca de nuevo cantar la canción de mi maestro,
esa que me ayudaría a ser mejor pescador
y que siempre tarareo cuando estoy contento:

"Me asomo impaciente en ese rincón que ya conozco, 
veo florecer los rayos rojizos de otro sol venidero, 
escruto atento cada detalle del inmenso océano, 
imagino todos los pedreros maquillados con esos aderezos 
y me encamino hacia una decisión fruto de otros intentos.

Mochila, chubasquero, carrete, comida, caña, agua y demás compañeros, 
cuidadosamente acomodados, 
serán testigos de mis errores o aciertos. 

Desciendo prudente entre cantos y agujeros.
Pensando como si fuese un pez en el mar,
selecciono una puesta sin viento
y después de macizar,
preparo cuidadoso mi primer intento.

Este es el procedimiento para pescar,
o por lo menos para intentarlo un tiempo,
ya que si no funciona debemos marchar
y comenzar la canción de nuevo"


Estas estrofas se repitieron durante toda la mañana,
puesta tras puesta y pedrero tras pedrero.
Las notas parecían querer perderse en la majestuosidad del mar,
sin atraer la magia de otras jornadas repletas de acierto.
Pero en este día no había espacio para lamentar
y cuando eso sucede,
al final triunfa el empeño.

Una de las puestas con demasiado golpe


Nueve sargos y una aguja,
todos ellos fueron para el caldero
y aunque no es un excepcional resultado,
tal vez sí fue el "merecedero".

Nueve sargos y una aguja


Para finalizar pido disculpas por mis desafines,
o por querer introducir improvisaciones en el cancionero,
pero es que me aburría en casa sin pescar
y quise buscar rimas para matar el tiempo.


Un saludo y buena pesca.














viernes, 24 de enero de 2014

Preparación de un macizo casero y muy efectivo para la pesca del sargo a boya

Hola amig@s:

A continuación intentaré explicar, de forma sencilla, los pasos a seguir para la elaboración de un macizo de primera calidad que nos aporte garantías de éxito en prácticamente cualquier escenario que nos encontremos.

Lo primero que debemos de tener en cuenta, es el objetivo del "macizado", que no es otro que atraer y mantener en la puesta elegida al mayor número de peces posible. Para ello tendremos que fabricar un producto consistente, que se adhiera a las rocas y que trabaje en profundidad, ya que si flotase, sería fácil que fuese arrastrado por la corriente alejando así con él a los peces de la zona.

Mi principal elección, por su versatilidad, su fácil preparación y su eficacia, es el macizo de sardina. Con esta materia prima de sencilla adquisición, podemos conseguir un engodo de primerísima calidad en nuestra propia casa y sin mucha parafernalia. Solamente precisaremos de un cubo con tapa para almacenarlo y transportarlo correctamente y una picadora como la de la imagen siguiente:

Picadora ELMA del número 22

Esta máquina la podemos encontrar en muchas ferreterías por un precio aproximado de cincuenta euros  y viene equipada con una placa de 19 agujeros de 12 mm, que en principio es ideal para la consistencia de nuestro preparado.

El modelo con el que yo trabajo es del número 22 y como podéis observar, es de manivela. En el mercado hay máquinas de tamaño superior y con motor eléctrico, que por supuesto son mucho más cómodas y rápidas, pero también mucho más caras y engorrosas a la hora de buscar un rincón para colocarlas.

La preparación de este macizo es muy sencilla, ya que solo consiste en coger sardina congelada, meterla en agua para que se descongele parcialmente y triturarla directamente con la picadora, la cual debemos fijar previamente a una mesa, encimera o tablón, bien con sargentas o con tornillos de palomillas y de manera que nos aporte estabilidad.

Las sardinas las picaremos de una en una y enteras, aprovechando cabeza, cola, espinas y demás partes de la misma. El resultado del proceso lo almacenaremos en un recipiente de cierre hermético de entre cinco y ocho kilos, dependiendo de las horas que vayamos a dedicar a la pesca.

Macizo casero de sardina y recipiente con gambas
para una jornada de unas cuatro horas

Si tenemos la suerte de poder comprar grandes cantidades de sardina, bien sea fresca o congelada, la mejor opción es conservarlas enteras en el congelador y descongelar sólo la cantidad que vayamos a utilizar en nuestra próxima salida. Pero debido a que muchas veces esto es difícil, ya que normalmente vienen en bloques grandes y compactos, otra posibilidad es picarla toda y congelarla en sus respectivos cubos, los cuales debemos poner a descongelar con tiempo suficiente antes de ser usados.

Cuando el precio de las sardina se dispara, o simplemente no somos capaces de conseguirla por nuestros proveedores habituales, podemos decantarnos por una opción rápida y que a mi me tiene dado buenos resultados. Se trata de recurrir a las tiendas habituales de pesca y adquirir dos cubos de macizo, uno de sardina o parrocha y otro de bonito. El primero no suele ser de muy buena calidad y el segundo tiene el inconveniente grave de que no es consistente, flota mucho más de lo debido y si lo tiramos desde altura lo lleva el aire y se dispersa, pero si mezclamos los dos al 50%, el resultado es más que aceptable por un precio aproximado total de quince euros para diez kilos de producto.

Medio caldero de bonito listo para ser
mezclado con sardina


Por último, mencionar que si alguna vez pescáis agujas y no son de vuestro agrado como reclamo culinario, podéis utilizarlas de engodo picándolas del mismo modo que si fuesen sardinas, pudiendo incluso mezclarlas con estas últimas y consiguiendo un macizo excelente y de primera calidad.


Un saludo y buena pesca.





miércoles, 15 de enero de 2014

Historia de un pescador tenaz

Hola amig@s:

Hoy voy a contaros la historia de un pescador tenaz y cabezota, que combatió las dificultades que el camino le iba poniendo a sus pies, con todos los medios de que disponía a su alcance y sin importarle el resultado final, ya que como los sabios le decían, "en el sendero habrás de encontrar lo preciado... y no así en el objetivo final".

Amanecía un día oscuro y frío de Enero, allá por el reino de las costas cantábricas, donde los dioses enfurecidos castigaban a los barcos pesqueros con olas gigantes y vientos atronadores. Todas las señales indicaban que sería otra jornada tranquila de reposo a la luz de la chimenea, arropado entre viejas historias de enormes pescatas e ilusos futuros de grandes capturas. Pero la aventura corría incesante por las venas y ese empuje es más fuerte que cualquier lógica aplastante. Así pues, y con la palabra precaución grabada en la frente, nuestro amigo pescador cogió sus bártulos y se encaminó decidido hacia la costa. Hoy de nuevo pasaría de ser contador de historias a personaje protagonista.

Al llegar al faro, observó la fuerza estremecedora de aquellas olas gigantes y se dio cuenta de que no estaba preparado para tal furia. Debía discurrir algo y usar el ingenio para engañarlas.



Repasó rápidamente todo el repertorio de escondites y lugares que conocía por la zona y pronto recordó uno que sin duda estaría al resguardo de aquella sobrecogedora violencia y donde intuía que en condiciones excepcionales como aquellas, los peces le estarían esperando hambrientos y voraces.

La bajada fue larga y dura, entre rocas mojadas y grietas resbaladizas, pero al final y con gran determinación consiguió llegar a su destino. La decepción fue mayúscula al observar que había podido engañar a las predecibles olas, pero no así a los escurridizos y racheados vientos que Eolo enviaba malhumorado hacia aquellas costas. El descenso había sido completamente en vano, ya que la pesca en esas condiciones era más que inviable.

Primera puesta elegida: pescable pero con
demasiado viento


Esta situación se repitió hasta en dos ocasiones más, provocando desánimo y pesadumbre. Entonces se sentó y contempló el paisaje que ante sus ojos se extendía. Observó aquella gran belleza disfrazada de adjetivos desapacibles e hizo memoria, llegando a encontrar entre sus recuerdos una antigua anécdota que un viejo pescador le había narrado hacía mucho tiempo y que describía un lugar ya abandonado a su suerte, pero que en condiciones similares a las que veía ante sí, tenía proporcionado grandes momentos de gloria a los pocos elegidos que lo conocían.

La senda estaba tan cubierta de espinas y matorrales, que a cada paso nuevos arañazos tatuaban su piel, pero la ilusión de poder superar las dificultades de aquella jornada, era mucho más fuerte que cualquier pinchazo. Tardó más de una hora en llegar a la orilla del mar, pero por fin, allí estaba, en uno de esos sitios mágicos que te hace sentir especial por ser el primero que lo pisas en lustros.

El resultado de una bajada llena de espinas


Abrió su mochila y comenzó a macizar la zona con sardina triturada, preparó lentamente caña y carrete, colocó la gamba en el anzuelo y lanzó el aparejo al agua. En menos de 30 segundos ya sintió la primera picada. Se trataba de un gran sargo que ocasionó una pelea cuanto menos dura y tensa, ya que el lugar estaba plagado de rocas donde podía esconderse e intentar tazar la línea, pero terminó sucumbiendo al esfuerzo y mostrando ese color negro en su cuerpo característico de aguas profundas que tanto gustan a los grandes ejemplares. Tras él vino otro...y otro... y otro...y otro más. Todos de gran porte y a razón de sargo por gamba. Pero de repente...nada...el silencio...ni otra picada...

Fué en ese preciso momento, cuando algo sobresaltó al afanado pescador. Algo lo observaba desde el agua. Estaba seguro pero... qué podía ser eso que aparecía y desaparecía de las profundidades? Acaso las leyendas que le habían contado de criaturas marinas eran ciertas??

Después de observar un rato, pudo identificar entre las olas unos ojos que le miraban fijamente. Se trataba de una juguetona nutria que parecía querer interactuar con él. Y entonces entendió ese parón en las picadas y que seguir pescando en ese lugar ya era tarea inútil.

Foto de la juguetona nutria que andaba rondando


Al final, la jornada terminó con 8 magníficos peces en el cubo. Pero pese a que la pescata no era digna de ser contada en sus "fabulescas" narraciones,  la sensación de victoria de nuestro protagonista se reflejaba en su sonrisa, ya que era sabedor de que se había superado a sí mismo y a todas las dificultades que había encontrado.

Resultado final: 8 trabajados sargos


Tal vez hoy no había escrito una historia épica en los diarios de pesca... tal vez hoy el caprichoso destino le había negado ese protagonismo... pero aún así... tal vez hoy... había recorrido una porción de ese sendero tan importante que le llevaría al objetivo final de ser mejor pescador.


Un saludo y buena pesca.






domingo, 12 de enero de 2014

Cómo escoger la mejor caña para la pesca del sargo a boya

Hola amig@s:

La caña es un elemento muy importante en cualquier modalidad de pesca en la que para nuestros fines haya que utilizar este utensilio. La tecnología cada día nos proporciona más avances, que en este caso, se traducen en virtudes de ensueño que ya hubiesen querido para sí los viejos pescadores que tuvieron que pelear con las antiguas varas de bambú.

Eso me hace recordar, inevitablemente, el primer día que un ribereño de agua dulce como yo, llegaba a un pedrero del Cantábrico con una caña de 7m, que hasta entonces había utilizado para pescar truchas y reos y con la osada determinación en la cabeza de poner en seco a unos cuantos de esos "sargucos" de los que tantas historias contaban. Menuda impresión me llevé con la primera picada!!! Nunca hubiera dicho que aquella caña podía doblar tanto.

Lo sorprendente fue que ese primer pez terminó en el cubo y que después de tomar la decisión de quitar el puntero para intentar ofrecer más resistencia a las embestidas de aquellos "demonios sargones", seguí pescando hasta que me acostumbré a las características y respuestas de la herramienta que en esos momentos tenía en las manos. Al final resultó una experiencia tremendamente enriquecedora, es más,  puedo decir que después de llevar toda la vida pescando, fué ese día y con esa caña... cuando aprendí lo que era pescar de verdad... Ni que decir tiene que clavar y trabajar el pez sin puntero eran tareas harto complicadas y que cuando tenía que izarlo, más temía por la caña que por el hilo. Aún así en esas circunstancias y después de unos cuantos juramentos e improperios lógicos y saludables, conseguí no desquiciarme y que los resultados comenzasen poco a poco a llegar.

Pero esta historia no termina ahí, sino al día siguiente y de la forma más lógica posible, es decir, yendo el que les narra corriendo raudo y veloz a la tienda de pesca para comprar una herramienta que le facilitase un poco la pelea que aquellos correosos peces le ofrecían. Y es que ese es el objetivo que debemos buscar en cualquier caña, ya que su misión no es otra que la de facilitarnos el trabajo lo más posible a los pescadores.

¿Qué características debo buscar en una caña para
la pesca del sago a boya?

Teniendo muy en cuenta las dificultades de esta historia y la posterior experiencia pescando con cañas especializadas, a continuación intentaré explicar brevemente las características que debe tener una buena vara para la pesca del sargo a boya:

1.- Debe ser una caña larga, principalmente para sortear los obstáculos con los que nos encontremos, tales como rocas y riscos y también para conseguir no ser nosotros los que nos tengamos que aproximar en exceso a las rompientes y cantiles.

2.- Debe ser una caña de memoria rápida, que recupere ágilmente y con velocidad su forma original después de ser doblada. También debemos de comprobar que al sujetar la caña horizontalmente ésta permanezca paralela al suelo sin que se arquee ninguno de sus tramos.

3.- Debe ser una caña con acción de punta, es decir, que solamente trabaje o doble el 30%-40% de la vara, mientras que el resto debe permanecer rígida. Esto nos permitirá clavar los peces mejor e izarlos desde una distancia prudencial.

4.- Debe ser un a caña fabricada con material ligero y resistente, siendo el carbono la mejor elección por la que nos podemos decantar.

5.- Debe ser una caña con un portacarretes fiable y resistente, ya que en muchas ocasiones izaremos las capturas a gran altura y el carrete ejercerá mucha tensión sobre esta pieza.

6.- También añadiría, aunque esto es más una elección personal, que las anillas de puente bajo son mejores para este tipo de pesca que las de puente alto.

Una herramienta con todas estas características, sin duda será capaz de facilitarnos mucho la dura pelea que ejerceremos y que tan apreciados hacen a estos poderosos espáridos.


Saludos y buena pesca.


Por cierto, esa antigua caña de trucha y reo todavía la conservo sin el puntero y de vez en cuando la sigo utilizando por los pedreros, principalmente cuando la nostalgia de aquellos comienzos me aprieta o cuando alguien no tiene equipo y sí la mala idea de venir a aprender a pescar sargos conmigo jejejej (la podéis ver en la foto que tengo en la primera entrada de este blog http://pescandoconurbano.blogspot.com.es/2014/01/presentacion.html)

martes, 7 de enero de 2014

Vídeo-preparación de 3 tipos distintos de bajo de linea para la pesca del sargo a boya


Hola amig@s:

A continuación os presento un video donde pretendo mostrar, de manera sencilla, el montaje de tres formas distintas de bajo de línea para la pesca del sargo. El conocimiento de estos tres métodos nos permitirá adaptarnos mejor a condiciones desfavorables, como es el caso de mares fuertes y corrientes abundantes.






Errores del video:

- Con viento fuerte es mejor tener montada una línea fina, no gruesa, como por error indiqué, ya que estas últimas hacen más resistencia al aire y perjudican nuestro control sobre la boya.


Saludos y buena pesca.

domingo, 5 de enero de 2014

"Desaparece un pescador en Corrubedo"

Hola amig@s:

Hoy amanecimos con esta mala noticia: "pescador desaparecido en Corrubedo".

Desde aquí me gustaría enviar palabras de aliento a la familia de este compañero de afición y transmitir mi sentimiento de pena y angustia por esta terrible mala nueva.

Es algo que desgraciadamente forma parte de nuestro día a día y con lo que nunca me acostumbraré a convivir.

Cuidaros mucho compañer@s.
Un saludo y buena pesca.



viernes, 3 de enero de 2014

Pescar sargos con olas de 4-5m

Hola amig@s:

Cuando las condiciones del mar son difíciles, como en estos días que nos encontramos, salir a pescar sargos casi más parece una locura que una certeza. Pero aún así, hay zonas escondidas que nos pueden dar una oportunidad.

Debemos olvidarnos de pesqueros expuestos o a nivel del agua, ya que un golpe de nuestro querido Cantábrico podría ser fatal y la seguridad debe ser, ante todo, lo principal y más importante, teniendo en cuenta además, que el impacto directo de olas de 4-5m difícilmente nos proporcionará un escenario de pesca correcto para estos espáridos. Por lo tanto ya tenemos un camino claro a seguir: buscar zonas resguardadas que nos permitan pescar desde la tranquilidad de las alturas.


Puesta perfecta situada en altura lejos de los
envites del mar

Las opciones que barajaremos seguramente no sean muchas y es aquí donde debemos tirar de experiencia adquirida, o en su defecto de una combinación entre Agencia Estatal de Meteorología - AEMET. Gobierno de España o de cualquier otra página que nos indique la dirección de las olas y Google Maps. El resultado de esta búsqueda nunca va a ser tan eficaz como el saber de los años, pero sí que nos puede ayudar a no quedarnos en casa.


Explicación gráfica:


En Aemet comprobaremos la dirección del viento y de las
olas generadas por el mar de fondo


En Google Maps buscaremos posibles puestas resguardadas


A priori parece complicado encontrar pesqueros protegidos del aire y de la agresividad del mar que nos permitan estar seguros y con posibilidades potenciales de pesca, la verdad es que a mí solo se me ocurrían un par de ellos, pero aún así, sin pensarlo mucho, me lancé de cabeza a tentar la suerte...


Resultado final de una jornada de pesca con olas de 4-5m

Tras observar el panorama desde el lugar de costumbre, llegué a la puesta seleccionada cuando la marea llevaba dos horas y media subiendo, momento perfecto, ya que se trataba de una zona inundada y justo entonces el agua ya pasaba de forma óptima por encima de las rocas. Macicé prácticamente en seco y en una zona protegida de la furia del mar y lancé la gamba al agua con cierto recelo. Fueron varios los cambios que me vi forzado a realizar en el bajo de línea para poder contrarrestar las fuertes corrientes, pero al final el resultado se puede calificar de positivo, principalmente por el porte de las capturas y por la gran experiencia adquirida tras pelear con estos luchadores infatigables en medio de las contundentes olas.

Saludos y buena pesca.










jueves, 2 de enero de 2014

Presentación

Urbano Carbajal


Hola amig@s:

Aquí un aficionado a la pesca con ganas de compartir vivencias y entresijos de esta sana afición.


Espero ser de ayuda para el pescador iniciado y aprendiz aplicado para el maestro experto, ya que ante todo un lema me mueve: "de nada sirve aprender si no compartimos para dar sentido a lo aprendido".


El Cantábrico en general y Asturias en particular van a ser mis principales escenarios de vivencias, siempre con la caña y el carrete como amigos fieles e inseparables. 


La idea es comenzar de forma paralela a los pasos que yo mismo fui dando, es decir, empezar por la técnica de la pesca a boya o corcho, para luego continuar con otras artes, especialmente spinning.


Por último, reseñar que este pretende ser un blog interactivo donde todos podáis publicar fotos y/o vídeos de pescatas y/o buenas capturas, así, como si fuese el caso, de material que pretendáis comprar y/o vender. Para este último apartado, dejo a vuestra entera disposición el siguiente correo electrónico: pescandoconurbano@hotmail.com


Sin más, deseando haber creado un espacio cordial y participativo, os doy la bienvenida.
Saludos y buena pesca.